Suavis Inimicitia "Vuelta a casa"
Aníbal
se quedo aclarado con la explicación de Adriana. Su matrimonio y la
pedida de mano fue totalmente distinta. Él conquistó Siracusa el
mismo día que acabo con la vida de la madre de Adriana y tuvo
brevemente el control de la ciudad. Pero cuando Cartago perdió
Sicilia y se vio obligado a desprenderse de la isla,él tuvo que
entregar Siracusa,pero la entrego a cambio de algo,o mejor de
alguien,le exigió a Julius la mano de Adriana en matrimonio.
En cuanto amaneció,todos se preparaban para irse
cuando Selene le dijo a Aníbal si podían hablar un momento a
solas,a Adriana no le importo,confiaba en su hermana,pero Aníbal no
confiaba en Selene,pero ante la insistencia de su cuñada no tuvo más
remedio que ir con ella,¿qué querría esa chica? Como fuese a
lanzarse a su cuello le daba una patada en el culo que la mandaba a
Escandinavia,pero es que lo malo era que Selene le tenía cogido por
donde más le dolía,podía hundir su matrimonio con decirle a
Adriana que fue él el asesino de sus padres. Selene lo llevó a una
parte casi desierta de la propiedad Augustus,fuese lo que fuese lo
que le iba a decir esa chica que lo dijese ya.
-Sea lo que sea dímelo ya.
-Perdoname por lo de la boda de Fabio- ¿sus oídos le
traicionaron? ¿Selene le estaba pidiendo disculpas? - No me
gustas,eres guapo pero amo a Julius. Solo lo hice para hacer daño a
Adriana,un daño que no se merece.
-Ah....pues vale...no paso nada....
-Y.....no le voy a decir lo de nuestros padres,no me
creyó...- inesperadamente Aníbal saco un daga y se la tendió a su
cuñada.
-Cógela- Selene,extrañaba,obedeció y tomo con su
mano derecha la daga que le ofreció Aníbal,él inesperadamente le
tomo la muñeca para que colocase la afilada punta sobre su
pecho,justo sobre su corazón.
-Puedes clavarme esta daga en el corazón si le dices a
Adriana lo que ocurrió. A mi no me importa que me hagas,puedes
llamarme perro judío si quieres,pero piensa en tu hermana y en tus
sobrinos. Si se lo dices a Adriana le arruinas la vida a ella,a Sadik
y a Aradna. Son felices,me estoy matando por compensarla por lo que
hice,daría mi vida por restaurar todo el daño que os hice a las
dos- Selene no pudo hace otra cosa que abrir mucho los ojos y mirar
sorprendida a Aníbal,de verdad quería a su hermana.
-¿Realmente la quieres?
-Estoy loco por ella. Llevó una vida esperándola....no
tienes ni idea de cuanto la he esperado....
-Pero Delinenar me dijo....
-Olvida a mi ex mujer. A Delinenar nunca la
quise,nunca, nuestro matrimonio fue concertado. No te pido que lo
entiendas,no me perdono todo el dolor que os cause de niñas,pero si
me dejas,Adriana nunca se arrepentirá de haberse casado conmigo-
soltó la mano de Selene y cogió nuevamente la daga para guardarla.
-Cuidalos.
-Por el honor de Cartago que lo haré- se fue de ahí
para volver junto a su esposa y su hijo,que ya habían terminado de
preparar todo para irse.
Luego llegaron las despedidas,los cuatro primos se
deshicieron en abrazos y en promesas de volver a verse pronto.
Julius también le dio un cálido abrazo a Adriana y a su bisnieto
Sadik,con Aníbal solo cruzaron una mirada y se dieron por pura
cortesía la mano,pero agarrándose de los antebrazos y apretándose
con fuerza. En cambio los hermanos Iulia si le dieron un abrazo a
Aníbal,quién no tardo en que lo soltasen, y a Adriana,y obviamente
al pequeño Sadik,quién había heredado de su padre el no querer
demasiadas muestras de afecto de su mismo género,que su madre y sus
tías le colmasen de mimos,besos y abrazos le gustaba,pero no le
gustaba que un hombre quisiera darle los mismos mimos que sólo su
madre o sus tías tenían derecho a hacerlo.
Selene,Adriana y Ailis se despidieron con la promesa
que volverían a verse y celebrarían por todo lo alto el nacimiento
del pequeño Iulia que venía en camino,de hecho Fabio y Ailis ya
habían pensado nombres; si era niño Máximo y si era niña
Lucrezia. Aunque Ailis tenían el presentimiento de que sería una
niña,una preciosa niña con los mismos cabellos rubios de Fabio y
los ojos oscuros de Ailis. En fin,sólo era cuestión de tiempo que
naciese.
Días más tarde por fin volvieron a Cartago, Adriana
echo muchísimo de menos a su pequeña Aradna,Sadik también extrañó
a su hermana aunque no lo admitiese,y Aníbal igual,no era en vano su
hija mejor. De modo que cuando llegaron a casa y Dido fue a
recibirles con Aradna en brazos,la niña no tardo de pasar de brazos
de su tía a brazos de su madre,quién lleno de besos y mimos a su
hija pequeña.
-Mami- dijo la niña acurrucándose en el pecho de su
madre,Aradna había que admitir que en el habla había sido más
precoz que su hermano mayor,Sadik a los ocho meses no hablaba con
casi tanta fluidez como Aradna,quién no balbuceaba tanto,si no que
decía palabras bien dichas,como “mami”,”hermano” y “papi”.
-Hola,enana-musitó Sadik mirando con cierto reproche a
su hermana,aún no se acostumbraba a la idea de compartir el cariño
de su madre,ya bastante tenía con compartirla con su padre. Aníbal
pensaba lo mismo exactamente,ya tenía bastante con compartir el
tiempo y el cariño de Adriana con los mocosos. Pero luego se
alegraba de tenerlos,si echaba una mirada al pasado,hacía cinco años
no se esperaba tener familia,se veía deambulando solo,amargado,con
solo con la guerra en sus pensamientos,sin sentirse tan.....humano.
Ahora en cambio tenía tres personas que dependían de él,que le
querían.....a pesar de todo le querían. Se quedo pensando
momentáneamente en lo que había sido su familia hasta el momento en
que formo la suya con Adriana,sólo le había dado cariño su hermana
mayor Dido,su hermano mayor,Arístides, había sido un cobarde al
huir con dieciocho años de casa y de Cartago a Atenas,él solo
contaba con ocho años cuando eso. Y el patriarca que
había....Hannon. Aunque la vida de su padre acabo hacía cuatro años
ya,aún su oscura presencia y los malos tratos a los que fue sometido
estaban presentes en el subconsciente de Aníbal,manifestándose en
pesadillas casi constantes. Así creía Aníbal que sería su
vida,solo,amargado. Pero desde que Adriana llegó trayendo consigo un
soplo de aire fresco a una casa que hacía años que no gozaba de una
presencia como la de Elisa Melkart,pura y que derrochase vida. Hacía
años que no se escuchaba el sonido de las risas. Adriana y sus hijos
habían traído consigo la frescura y la pureza no solo al hogar,si
no también a la vida de Aníbal.
El amor, los secretos... la familia... A veces hay sacrificios que se deben mantener en silencio por el bien de todos. Y no es engañar. Es ocultar la verdad para no hacer más daño del que en su día se hizo. En ocasiones, no hay mayor castigo que el no ser castigado por que el dolor tortura las entrañas...
ResponderEliminarBesos de Pecado.
Ese es precisamente el castigo de Aníbal,el cargar con la culpa en silencio,aunque sea para proteger a su familia y por amor. Nunca se quitará de la conciencia lo que hizo en la familia de Adriana.
EliminarUn beso querida amiga :3
Me ha gustado, sobre todo cuando dice.... estoy loco por ella. A ver si encuentro yo a uno que me diga eso, que me desmayo, ja ja ja. Buen finde y un abrazo.
ResponderEliminarYo también quiero uno que me diga cosas asi,yo también acabaría desmayada en el suelo xD
EliminarUn beso
Oooowwww que bellooooo al decir eso.. Pero esto del secreto de Aníbal para con Adriana me tiene en suspense, pobre de él porque sabe que la perderá si ella se entera :/
ResponderEliminarBesos, querida Sandryska :**
De momento Adriana no se enterara,si se enterase no seria capaz de estar con él,además de que ella perderia a sus hijos (en esa época en un divorcio se quedaba a los niños el padre)
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