Suavis Inimicitia "Paz"

Tras darse un largo y reconfortante baño,Adriana se vistió con un vestido gris perla con  ambos lados de la falda de color morado a juego con el cuello del vestido y el cinturón que iban a adornados con pedrería,con un velo-capa semitransparente de color morado que se sujetaba a los brazaletes plateados que llevaba Adriana en las muñecas y se pillaba también en la espalda del  vestido.  Casi cinco meses en Iberia vestida siempre con ropas íberas,había extrañado en cierto grado las vestimentas púnicas,cómo la que llevaba ahora, y los vestidos romanos que aún tenía.
    Ambas cuñadas estuvieron parte de la mañana hablando sentadas en unos divanes en el balcón de la habitación conyugal mientras contemplaban las vistas del puerto. Mientras Âkil,de ya once años y Sadik,de cuatro, jugaban en uno de los patios interiores con una pelota a espaldas de sus madres,ya que Âkil estaba castigado.
    Aradna estaba durmiendo en la habitación colindante pero no tardo en despertarse y obtener la atención de las mujeres . Dido hacía tanto que no veía a sus sobrinos y al verlos de nuevo pudo confirmar que habían crecido mucho y que estaban preciosos,la pequeña ya pronto intentaría decir sus primeras palabras.

    -Se os hecho de menos a todos cuando estuvisteis en Iberia- dijo Dido cogiendo a su sobrina en brazos ¡si que había crecido esa niña!

    -Yo también te extrañe a ti y a Âkil. Y a Cartago....no se Dido...últimamente no se de donde soy.- Dido frunció el ceño ante las palabras de Adriana.

    -No te entiendo...

    -Roma y Cartago. Nací y crecí en Roma,pero me case aquí,mis hijos han nacido aquí...

    -¡Ah,ya! Pues es normal,tus raíces están en Roma,pero estás viviendo aquí y ya no eres una extranjera. Hablas púnico fluídamente y aunque cuando hablas en latín aún tienes acento púnico.

    -Esa es la cuestión,¿soy más púnica que romana?- Dido simplemente se encogió de hombros,no podía ayudarla en eso porque esa cuestión era algo que debería resolver Adriana solo con el tiempo.

    -Ma....ma- dijo de repente una pequeña vocecita,Adriana y Dido clavaron sus ojos en Aradna,quién miraba fijamente a sus madre con sus grandes ojos de venado,Adriana al escuchar las primeras palabras de su hija casi se hecho a llorar de la alegría,¡su niña ya hablaba! Adriana no tardo en coger a su niña en brazos y llenarla de besos.

    -Mi niña....-musitó Adriana,en escena aparecieron pronto Sadik y Âkil para reunirse un rato con sus madres,Sadik al ver a su madre con los ojos humedecidos se preocupo,desde Iberia se había propuesto que su madre nunca llorase.

    -Mami,¿qué pasa?

    -Sadik,tu hermana ya habla-  Sadik y Âkil se miraron entre sí y el mayor se encogió de hombros.

    -En fin....-murmuro Âkil yéndose disimuladamente ,lo que Adriana y Sadik no sabían era que Âkil estaba castigado por haberse saltado las clases hacía unos días con sus amigos y que cuando Dido se enteró casi le dejo sin oreja y le dejo la nuca roja por las collejas y un castigo de mes y medio sin jugar ni ver la luz del sol salvo para ir a clase,obviamente un esclavo era el encargado de llevar al niño a casa del maestro ateniense Philipo.

    -Âkil,la condición para venir a casa de tus tíos era que estuvieses estudiando,te trajiste los pergaminos,así que ¡a estudiar y sin rechistar si no quieres ver el sol en dos meses y medio,que me vas a llevar a la tumba antes de tiempo!- Âkil no rechistó y se fue corriendo para no recibir otra colleja de su madre o más regañinas.

    -¿Esta castigado?-preguntó Adriana,Dido suspiró resignada.

    -Sí,por saltarse las clases. Me lleva este niño por el camino de la amargura.

    -¡Adi!- llamo la niña a su hermano mayor,el cuál se ruborizo un poco porque fue lo segundo que dijo su hermana,al menos eso creía.

    -Mami,me llamo Adi....-musitó el niño sacándole una carcajada a su madre y a su tía.


    Estuvieron más o menos así todo el día,aunque Aradna no dijo nada más,balbuceaba algunas cosas pero no can tanta claridad como las que dijo antes. Âkil a modo de estudio,con la aprobación de su madre y su tía,le enseño un poco el alfabeto a Sadik,aunque el niño no tendría que aprenderlo hasta los siete años,pero de todas maneras Âkil le empezó a enseñar el alfabeto y los números.
    Ya por la tarde noche llegaron Aníbal y Aderbal. Âkil al ver a su padrastro pudo suspirar tranquilo ya que con la presencia de su padrastro su madre se relajaba un poco,a ver si pasaba....

    Adriana había acostado a Aradna en la cuna cuando llegó su esposo,cuando llegó Aníbal,Adriana fue a recibirle y cuando lo vio casi se tiro encima de él para abrazarle.

    -¿Q-qué haces Adriana?-preguntó él ruborizándose bastante por el efusivo abrazo de su mujer,cómo respuesta obtuvo un beso en plena boca,suponía que era porque Adriana estaba feliz de estar nuevamente en Cartago,ya que desconocía que su hija menor hubiese dicho ya sus primeras palabras.

    -Aníbal,estoy feliz- dijo ella sonriente por el orgullo,aunque Aníbal creía que era por el estar ya en casa y no en Iberia, de hecho se regocijo al ver a su mujer vestida con ropas púnicas tras tanto tiempo verla con ropas íberas.

    -¿Por estar en casa?- preguntó simplemente,Adriana negó con la cabeza sin perder la sonrisa.

    -No. Aradna ya habla- Aníbal no supo como reaccionar,es más no dijo nada,solo beso nuevamente los labios de su mujer,aún no sabía expresar del todo sus emociones con palabras,pero si con gestos,cómo ese, con eso le decía a Adriana que estaba orgulloso,al fin y al cabo Aradna era su hija y su sangre hervía de orgullo cada vez que sus hijos daban un paso más en su largo camino. 
    Adriana no solo le dijo que Aradna ya empezó a hablar,si no también que Sadik estaba aprendiendo de su primo ya el abecedario entre más cosas. El orgullo de Aníbal no que  manifestaba con palabras se incrementó. Sus hijos eran su orgullo aunque no lo dijese, Sadik era su primogénito y que poco a poco fuese teniendo autonomía le enorgullecía y que su niña ya fuese creciendo le encantaba. Estaba convencido de que habían heredado lo mejor de Adriana y de él.

(Imagen del vestido)

(Amor)

Comentarios

  1. Esta muy bello el vestido
    que encantadora escena
    Saludos

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    1. Es que vi esa imagen que concordaba con la época y me gusto *-* (es de las fiestas que hay en España de cartagineses y romanos) me agrada que te guste n.n
      un beso

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  2. Muy buena entrada, Sandryska. Me alegro mucho de regresar a este bello lugar de nuevo y observar que sigues igual de creativa con tus imaginativas historias.
    Por cierto, muchas gracias por todos los comentarios que has ido dejando en mi humilde rinconcito, me han dado mucha energía tus palabras.

    Besos,
    Windflower.

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    1. Hola,siempre es un placer tenerte por aquí,me agrada que te guste la historia que estoy escribiendo.
      Un beso

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  3. Escribir es un placer del que no muchos se pueden celebrar. Hacerlo así, siguiendo una trama, buscando las imágenes que apoyen los textos, hacer que quien nos lea se introduzca como parte de nuestra historia... Te aseguro, y no te digo nada nuevo, requiere un tiempo precioso y de unas capacidades, generalmente, innatas. A veces no damos en verdadero valor a las cosas. Felicidades por tu trabajo. Siento tardar tanto en aparecer pero tengo el tiempo muy delimitado últimamente.
    Besos de Pecado.

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  4. me ha encantado, es un capítulo precioso.

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