Suavis Inimicitia: "Espera"
Semanas habían pasado desde que Aníbal acompañado por
Aderbal y Élbir habían partido desde el puerto de Cartago hasta
Grecia. Adriana y Dido estaban preocupadas porque no habían recibido
ninguna noticia de ellos,¿les habría pasado algo? Los dioses
intercediesen para que todo les hubiese ido bien.
Una de tantas noches de soledad,Adriana estaba pasando
un rato agradable con sus hijos,una cosa que hacía ,y que no le
gustaba mucho a Aníbal,era bañarse con con ellos,su marido toleraba
de momento que Sadik se bañase con su madre porque el niño tenía
seis años,pero cuando creciese un poco más sería una prohibición
el bañarse con su madre y con su hermana.
Adriana no veía nada malo en bañarse con sus hijos en
la bañera,porque todo eran risas y mimos,ella tenía sujeto al
pequeño Amílcar mientras sus dos hijos mayores jugaban en el agua
tibia.
-¡Mamá,Sadik me esta tratando de ahogar!- se quejó
Aradna mientras le daba un tirón de pelos a su hermano mayor.
-¡Es mentira!- las clásicas peleas entre hermanos,en
cierta forma que se llevasen pocos años entre ellos era a veces una
ventaja y otras era todo lo contrario.
-Niños,parad ya- Adriana sonrió para si mientras el
pequeño Amílcar sujetaba con sus pequeñas manitas uno de los
largos mechones del cabello de su madre y se ponía a jugar con
el,amorosamente Adriana estrechó a su benjamín contra su pecho
mientras le daba un beso en la cabeza.
-Vamos a salir ya de la bañera,que se esta haciendo
tarde y es casi la hora de dormir- ante las protestas de sus hijos
mayores,salió de la bañera llevando al bebé en brazos,menos mal
que estaban las esclavas Elira y Atia para ayudar a su ama y secar a
cada uno de los niños mayores,envolviéndoles en unos paños de lino
para que se secasen (no existían toallas en esa época,creo,si es
que si dejádmelo en los comentarios por que no lo se) Elira no tardó
en coger a Amílcar para que Adriana se secase y envolviese su cuerpo
en una de las sábanas.
Las esclavas no tardaron en llevar a los niños a su
habitaciones para que se vistiesen y porque Adriana les pidió
intimidad al menos mientras se vestía,ahora después iría a ver a
sus hijos y contarles un cuento.
Una vez se quedo sola,Adriana no tardó en ponerse un
sencillo vestido blanco de lino y por encima una bata del mismo color
también de lino,era ya invierno y el frío estaba cada vez más
presente. Una vez vestida fue a arropar a sus hijos,que el baño los
dejo rendidos,así que sólo les arropo y les dio un beso de buenas
noches a Sadik y a Aradna,con Amílcar tuvo que darle la cena,así
que se descubrió parcialmente el pecho y el menor no tardo en
aferrarse a su madre y empezar a mamar,pero como el pequeño no se
dormía una vez cenó, Adriana lo meció suavemente entre sus brazos
y empezó a cantar con voz suave y cálida una nana,el niño no tardó
en caer rendido al sueño entre los brazos de su madre,quién le dio
un beso en la frente antes de depositarlo en la cuna y taparlo.
-Duerme,mi vida. Tu madre vela por ti y por tus
hermanos- dijo antes de irse de la alcoba de su hijo menor para
dirigirse a su alcoba,cruzándose con Elira.
-Ama,¿necesita algo más?
-Compañía- entre la ama y la esclava había una
fuerte amistad,así la primera obtenía compañía cuando estaba sola
y la segunda protección. Una vez en la alcoba matrimonias,Adriana
procedió a sentarse frente al espejo y desenredarse su oscura melena
ondulada.
-¿Lo hago yo mejor,señora?- preguntó Elira,a lo que
Adriana asintió,cediéndole el peine y empezando la esclava libia de
peinar la larga melena de su ama.
-¿Puedo preguntarte una cosa,Elira?
-Por supuesto.
-¿Te has acostado alguna vez con Aníbal?- preguntó
de golpe Adriana,Elira palideció,nunca se había acostado con
Aníbal,algunas esclavas de la casa si pero fue antes de que Aníbal
y Adriana se casasen,desde entonces Aníbal había permanecido
completamente fiel a su esposa.
-No,nunca. El amo sólo se acostó con alguna de las
esclavas antes de que os casaseis.
-Entonces....¿ni tú ni Atia os acostasteis con mi
marido antes de que me casará con él?
-No....tuvo amantes pasajeras,pero desde vuestra boda
os ha sido completamente fiel- Adriana debía de admitir que era
posesiva con Aníbal,la idea de que otra mujer compartiese lecho con
él le aterraba y odiaba algunas de las esclavas que había en la
casa porque había tenido relaciones con Aníbal antes de que él se
casase con ella.
-Soy posesiva con él,tengo que admitirlo,pero no
soporto la idea de que otra mujer se haya podido acostar con él-
Elira esbozó una sonrisa,ella también estaba enamorada de su propio
marido,otro esclavo de la casa,podía entender que fuese posesiva con
él. Además,Aníbal también era muy posesivo con su mujer.
-Así es el matrimonio,uno es posesivo con el otro.
-Elira,puedes retirarte,voy a acostarme- Elira inclinó
la cabeza y se fue dejando sola a su ama. Adriana suspiró al verse
sola,extrañaba a su marido bastante,la cama se le hacía muy grande
y no le gustaba despertar sola,sin su calor. Noche tras noche sin sus
caricias ni sus besos.
Adriana se quito la bata,quedando solo con la túnica
blanca y abrió las mantas para acostarse en la cama,extrañaba su
olor,su calor....ahora las mantas solo olían a su propio perfume y a
los aceites con los que había ungido su cuerpo en el baño y el olor
a limpio de las sábanas de lino y la manta de piel de oso que
proporcionaba un gran calor. Se acurruco entre las mantas y se abrazó
a la almohada,al menos se podía abrazar a algo,aunque no fuese tan
duro y fibroso como el cuerpo de Aníbal. Duro,fibroso y surcado de
cicatrices de las batallas.
Sin
más,presa del recuerdo de su esposo,además de demasiadas noches de
soledad en la cama,subió su túnica hasta la altura del vientre,sus
manos bajaron lentamente,acariciándose con suavidad,cerrando los
ojos ante el contacto de sus propias caricias,pero en su mente venían
una y otra vez muchas de las escenas del sexo duro y salvaje que
tenía con su marido,además de las pocas tiernas,en fin era en el
fondo una romántica....
Pero
la calentura podía más que el romanticismo en ese momento,de modo
que introdujo su mano dentro de su ropa interior hasta llegar a su
sexo húmedo y deseoso de atención y de tener un orgasmo. Cabía
decir que Adriana desde que entró en la pubertad tenía la costumbre
de rasurarse el sexo por pura comodidad,le resultaba desagradable en
vello en ciertas zonas cómo su sexo o en otras partes de su cuerpo.
Pensó en Aníbal mientras sus dedos lentamente empezaban a frotar su
clítoris,pensó en su cuerpo,sus anchas espaldas,sus abdominales,sus
fuertes brazos....y también su sexo. Cuando era más joven y
escuchaba a veces las conversaciones junto con su hermana a
escondidas las conversaciones de patricias mucho más mayores que a
espaldas de sus maridos hablaban de sus amantes,especialmente algunas
elogiaban a los amantes venidos desde el norte de África,de regiones
cómo Cartago y Libia, y sobretodo elogiaban “las espadas de gran
tamaño de los cartagineses”. Lo entendió a la perfección una vez
casada con Aníbal.
Sus
dedos se iban mojando cada vez más con los fluidos vaginales que
humedecían sus muslos. Su respiración se iba acelerando cada vez
que el frote de sus dedos aumentaba,sus pezones se habían erizado y
con su mano izquierda empezó a acariciar uno de sus pechos con
suavidad,provocándole más placer.
Físicamente
estaba sola,pero en su mente fantaseaba con la vuelta de Aníbal,de
cómo usaría su gran “espada” con ella,de hacerla gritar de
placer y delirio. Deseaba sentir su lengua recorriendo su cuello,sus
manos imponiéndose,su poderoso miembro entre sus piernas a la vez
que la embestía con brutalidad. Pero en vez de a él cómo único
consuelo tenía sus dedos.
El
clímax estaba ahí,tan cerca...aumento la velocidad de sus dedos,sus
piernas temblaron a la vez que ahogaba los gemidos y jadeos que
estaba deseando gritar,introdujo de golpe dos de sus dedos con algo
de fuerza mientras su mano izquierda seguía acariciando sus pechos.
No logró aguantar mucho más tiempo,demasiadas semanas a pan y agua
y esa era una pequeña liberación,de modo que cuando noto el
orgasmo,arqueó su cuerpo hacía adelante al mismo tiempo que su sexo
liberaba su esencia femenina.
Se
dejó caer en la cama al mismo tiempo que trataba de regularizar su
respiración,pero de repente empezó a escuchar ruidos cerca de su
habitación,se levantó de la cama.
Abrió la puerta de golpe y se choco con alguien.
-Auch....-musitó,levantó la cabeza y se quedó helada
al ver quien era: Aníbal.
-¡Aníbal!- se lanzó a abrazarle y Aníbal no pudo
hacer otra cosa que recibirla entre sus brazos,lo había ansiado,al
abrazarla,el sentir el calor de Adriana.- ¿Le encontraste?- preguntó
emocionada con el regreso de su marido,había rezado mucho para que
el viaje no hubiese sido en vano.
-Lo encontré,mañana te presento al hijo de Arístides.
-¿Mañana?
-Esta noche eres sólo mía- estaba deseoso de estar
esa noche con ella,a pesar de que estaba desaliñado,algo desaseado
por el viaje,pero ansiaba gozar esa noche con su mujer entre la
calidez y la suavidad de las sábanas.
-¿Cómo es tu sobrino?-preguntó Adriana,quería saber
que el viaje a Grecia no fue en vano,pero fue callada por un salvaje
beso de Aníbal. Semanas de separación serían compensadas en una
noche.
hola querida
ResponderEliminares un placer pasar por tu casa y sentir tus palabras
llenas de emocion cuando escribes
un abrazo escritora
Hola guapa! Es todo un placer el tenerte por aqui y leer tus bellos comentarios.
EliminarUn beso
Yo también os echaba de menos a todos, me encanta pasar horas leyendo los blogs, pero casi no tengo tiempo. A ver si pasan estos meses y puedo conectarme más a menudo.
ResponderEliminarUn saludo!
A mi los estudios me hacen estar desconectada de todo,es agobiante pero se entiende n.n
EliminarUn beso
Hay noches de todo o nada... En esta ocasión, de todo.
ResponderEliminarLa verdad es que no podemos hacer de una afición una esclavitud. Todos tenemos obligaciones ajenas a esto. Y lleva mucho trabajo atender el propio blog, los comentarios externos, las redes sociales... Hay que tomarse las cosas poco a poco porque intención tenemos pero sí, falta tiempo.
Besos de Pecado.
Es el único relato que he leido y por eso seguramente no haya entendido alguna cosa (sorry, no tengo mucho tiempo para leer aparte de cosas de clase) pero sí puedo decirte que seguramente, lo que son toallas y eso no existieran, serian paños de lana y demás, que aunque tampoco sé muy bien el año en que está ambientada tu historia, los tejidos serian de lana, lino y poco más... Por lo demás, no es el tipo de historias que me vayan mucho pero leeré algo más a ver~~
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