Suavis Inimicitia



Los tres primos estuvieron un rato hablando,Adelphos y Fabio les pareció que Sadik era un amor, Sadik por su parte les caía bien sus tíos,pero le parecían un poco tontos,pero enseguida se le paso cuando Adelphos empezó a jugar con él.

-Mira,Adelphos se hecho un amiguito de su edad.- dijo Fabio a Adriana sin poder contener una risita,Adriana tampoco la pudo contener ante las palabras de su primo.

-¿Cómo van las cosas en Roma? ¿Selene y Julius.......?- no había olvidado la traición de su abuelo y su hermana,pero seguían siendo su familia y quería saber como estaban.

-¿No lo sabes?

-¿Qué no se que?- Fabio giró su cabeza para mirar a Adelphos,el cuál también le miró y de inmediato se echaron a reír a carcajada limpia.

-Verás Adriana,cuando salve a Aníbal en una de las batallas en Malta, estábamos en una montaña en esa condenada isla,bien,hubo un derrumbamiento,bien,salte sobre Aníbal y nos refugiamos bajo mi escudo.- empezó a relatar Adelphos con inesperada seriedad, Adriana conocía ese hecho, lo había contado el propio Aníbal el que le debía su vida al príncipe de Sardonia.- Pues bien,nos apresaron a Julius, a Fabio,a nuestro padre Octavio y a mi. Pues en la Castra creíamos que Aníbal nos iba a matar, sobretodo a Julius. Pero,Aníbal dijo en voz alta y clara que no le mataría por respeto a ti,eso nos dejo a todos helados. Pero eso no significo que lo dejase libre,se lo entrego a sus soldados para que hiciesen con el lo que quisieran pero que no le matasen. Y con lo que quisieran digo, lo que quisieran.- ambos hermanos se echaron a reír a más no poder, Adriana no pudo evitar reírse también, la homosexualidad estaba vista bien en Roma,pero siempre que fuese uno el activo,no el pasivo, de modo que eso fue una humillación tremenda para Julius.

-Cómo Delphos le salvó la vida a tu esposo,nos dejo estar a nosotros junto a nuestro padre.- continuó Fabio.- a la mañana siguiente nos soltaron a los cuatro,pero Julius no quiso decir ni una palabra y.....andaba un poquito raro....- los tres se empezaron a reír de muy buena gana, Sadik los miraba con curiosidad ya que no entendía de que hablaban su madre y sus tíos.

-De modo que Selene y Julius odian más a Aníbal,más a Cartago,a ti y a nosotros, fui castigado por Julius por salvar a Aníbal, pero padre intervino para que no me ejecutasen,sólo fui azotado unas cien veces con látigo.- musitó Adelphos de manera lúgubre,pero en un instante recuperó el buen humor. Si salvo a Aníbal fue por Adriana, no quería dejarla viuda, y así, por ella, Aníbal tenía una deuda de honor con Adelphos.

-Estoy en deuda contigo,Adelphos, salvaste a Aníbal de la muerte,no sabes cuanto te lo....¡ah! - sintió de golpe un pinchazo en su vientre e instintivamente se llevó la mano a su bebé,pero no era exactamente ahí,sino un poco más abajo,sabía lo que quería decir: ya venía.

-¿Qué pasa?

-Ya viene....- ambos jóvenes se quedaron helados al escuchar esas palabras de labios de Adriana. Fabio se llevó corriendo a Sadik para que estuviese con su niñera Elira, no era conveniente que el crío fuese testigo del nacimiento de su hermano.
Adelphos se apresuro a ayudar a Adriana a dirigirse a la cama más cercana, les tocaría a él y a Fabio hacer de comadronas si no se daban prisa.

-¡Adelphos!- Adriana sintiendo muchísimo dolor le clavó con una fuerza desmesurada las uñas a su primo.

-Tranquila,tranquila,tú.....eh....respira.

-¡Llama a una comadrona idiota!- Adelphos se asomó a la puerta,diciéndole a Fabio a gritos que fuese corriendo a por una comadrona o Adriana les mataría,enseguida volvió al lado de su prima a sujetarle la mano,al menos que se desahogase partiéndole la mano.

-Venga Adriana,ya pariste una vez,podrás otra.

-¡¡Cómo no te calles te arrancó la cabeza!!- amenazo Adriana,retorciéndose de dolor por las contracciones,cada vez más continuas, cada vez más dolorosas. A Fabio no le daría tiempo a llegar, se perdería,no conocía Cartago y no llegaría a tiempo.
Menos mal que una de las esclavas mayores sabia bastante sobre partos,normal tras haber dado a luz cuatro hijos hacía años, por lo que al escuchar los gritos de dolor de su ama fue a tratar de ayudarla en lo que venía la comadrona. Adelphos trato de ayudarla,cómo por ejemplo le ofreció su capa por si el pequeño nacía antes de tiempo,porque ese niño al parecer tenía ganas de venir a este mundo ya.
Tal y cómo se supuso, Adriana tuvo que dar a luz con la ayuda de Adelphos, que trataba de mirar a otro lado,porque le asqueaba el milagro de la vida y con ayuda de esa esclava que sería gratamente recompensada. Adriana como la vez anterior acabo desvaneciéndose a causa del dolor y del esfuerzo. El sentir cómo sus huesos se separaban,sus músculos se contraían para dar paso a una nueva vida era demasiado,pero finalmente consiguió que el pequeño saliese de ella junto con un torrente de fluidos.

Adriana cuando abrió los ojos estaba todo semi borroso aún,las sábanas olían limpias cuando esperaba que estuviesen llenas de manchas de sangre y placenta,lo primero que sus ojos vieron fue a Adelphos que tenía un pequeño bulto envuelto en su capa, el príncipe observaba a ese bulto fijamente,entonces fue cuando Adriana escuchó un pequeño llanto. Un niño. ¡Su niño!

-Es una niña.- dijo Adelphos tendiéndole a la recién nacida, Adriana trato de incorporarse,pero de no ser por la ayuda de la esclava que aún seguía ahí no hubiese podido,con brazos temblorosos tomo a su benjamina. ¡Era preciosa! Tenía la misma piel morena de su hijo y su marido, el poco pelo que tenia era negro azabache y los ojos,los mismos ojos que ella.

-Gracias por ayudar,Adelphos. En cuanto a ti.- miró a la esclava con infinita gratitud.- Serás recompensada en cuanto pueda. Cualquiera que me haya ayudado a traer al mundo a mi hija lo será.- la pequeña lloro de hambre,obteniendo toda la atención de su madre, Adelphos se giro para que Adriana pudiese descubrirse parcialmente el pecho,al cuál la niña no tardo en aferrarse a él y comenzar a mamar por primera vez,estaba agotada,dolorida pero feliz, tras nueve largos meses por fin tenía a su pequeña en brazos. Adriana le dijo a la esclava que llamase a Elira para que trajese a Sadik,debía de conocer a su hermana.
Elira no tardo en llegar trayendo de la mano a Sadik,el cuál se le había tratado de escapar un par de veces para saber porque su madre gritaba tanto.

-Mamá....

-Ven a conocer a tu hermana.- el niño se apresuró a subirse a la cama para ver a su hermana,fue una decepción tremenda,él esperaba un niño de su edad,no ese pequeñajo ser.

-¿Esto es mi hermana?- preguntó evidentemente decepcionado. Adriana se hecho a reír por eso y porque Adelphos se tumbo en cama muy mareado.

Comentarios

  1. Respuestas
    1. He de decir que pobre Adriana,vaya ayuda para parir xD

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    2. yo he puesto otro, el 73 de historia de un amor :).

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    3. Ya lo lei:3 En serio.con esta entrada me meo por Adelphos xD

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    4. es que es muy gracioso. jejeje... no sirve para atender partos XDXD.

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    5. No tiene futuro de comadrona XDDD mejor que se quede como soldado.
      Me encanto la entrada que escribiate en tu blog *-*

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    6. publiqué nueva entrada ahora mismo :).

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  2. que placer es siempre leerte y ver la maravilla de tus palabras

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