El Lobo y la Esclava: Capítulo 9 " Primer contacto"


Los gemidos cada vez eran más fuertes, el sonido de ambos cuerpos chocando entre si mientras ahogaban entre fieros besos compartiendo saliva, incluso mordiscos de manera apasionada y lujuriosa. Contra un árbol, ocultos de las miradas de todos estaban entregados a la más ruda y salvaje pasión.

— Joder...  rugió Hjalmar mientras se derraba dentro del esclavo. Aléxandros tampoco pudo aguantar mucho y acabo casi al mismo tiempo que el nórdico quien devoró sus labios con pasión. Habían empezado aquella relación la misma noche que Alexándros llegó a su hogar y era totalmente apasionada, ambos no tenían mal visto en sus culturas el sexo entre hombres mientras que se casasen y tuviesen hijos con mujeres, pero Hjalmar no pensaba aún en eso y estaba más que encantado con el griego y Aléxandros con Hjalmar. Ambos eran de la misma edad y desde el primer momento había una evidente atracción.

— Demasiado bueno....  al contrario que Julia, Aléxandros se esforzaba por intentar aprender el idioma por lo que podía intercambiar algunas palabras con su amante quién volvió a besarle apasionadamente. 

"Qué tonta es Julia..."  pensó el griego volviendo a vestirse mientras veía como su amante empezaba a vestirse. Habían pasado un par de semanas desde que fueron comprados por Einar y la romana le contó que Einar quería algo con ella pero ninguno de los dos hacía nada. 


Aléxandros acompaño a Julia a comprar comida, la romana poco a poco iba aprendiendo algunas palabras pero aún no podía formular frases completas pero Frida los mandaba igualmente. Esto pasaba después de que Julia hubiese ido a recolectar plantas y hubiese tenido aquella pequeña conversación con Einar.

— ¿Einar y tú....?

— No

— Pero....

— Yo voy a escaparme en cuanto pueda. Quiero volver a Roma con mi familia   hablaba mucho pero no llegaba a hacer nada, no había hecho amago de escaparse de la casa comunal y subirse a un barco con destino o a la Galia o a Italia y volver a Roma.

— ¿Puedo confiar en ti?

— Sabes que sí.

— Hjalmar y yo somos amantes   la morena se quedó mirando a Aléxandros, no esperaba que le fuesen aquellos gustos, pero no le importaba, pero aún así le sorprendía y más desde que hacía un par de días había pillado a Kaile con uno de los hermanos menores de Einar, supuestamente ella fue comprada para "hacer un hombre" a los adolescentes.

— ¿De verdad?

— De verdad...es...maravilloso. Julia deberías.

— ¡No!  exclamó aumentando el paso y llegando a un puesto a comprar pescado para la cena. Frida y la vieja celta que llegó con ellos estaban preparando la comida.



Iban a embarcarse a la mañana siguiente Einar y sus hombres para irse al sur a hacer pillaje y ese banquete era una despedida pues algunos de los hombres, granjeros en su mayoría, y casi todas las mujeres, al menos las que no decidieron acompañar a sus hombres o las que eran skjaldmö, mujeres guerreras que solían ir también, de hecho Yvette deseaba en unos años ir con sus hermanos por lo que estaba entrenando con sus hermanos para en un futuro ser una skjaldmö.

Einar comía y bebía saboreando ya el viaje cuando miró a Julia quien estaba sirviendo más comida a un hombre, ¿por qué le importaba tanto? Era solo una esclava, puede que fuese por su orgullo de que ninguna mujer se le resistia o porque se sentía fascinado por aquella muchacha de origen rico que había acabado en la esclavitud.

—¡Julia! Sirveme más cerveza— exclamó Einar mientras la romana obedeció trayendo consigo más cerveza y relleno la copa de Einar. Él la agarró de la cintura y la sentó en su regazo para sorpresa de ella. 

— Tengo....trabajar.

—Soy tu amo. Te ordeno que te quedes conmigo. Bueno compañeros...mañana nos vemos — los hombres rieron cuando Einar se levantó llevandose a Julia consigo fuera. La muchacha se dejó guiar hasta que estuvieron en el muelle sobre el agua.

—Siéntate— la empujó suavemente hacía abajo de los hombros para que Julia entendiese y ella lo hizo. Einar se recostó apoyando la cabeza en el regazo de Julia y cerrándo los ojos. Se escuchaba de fondo el sonido del banquete pero bastante lejano mezclado con el cercano sonido del mar, estaban ambos bajo la luna llena, solos.

— Dame de beber— "Beber" lo entendía a la perfección, la romana volcó lentamente la cerveza en la boca de Einar quién bebió. Julia inconscientemente acariciaba el rubio pelo de Einar trenzado encontrándolo increíblemente suave. 

— Bebe tú — asintió con la cabeza y Julia obedeció dando un pequeño trago a la cerveza.

— Óst min, kyss mik.*— no entendió nada pero Einar se incorporó apoyando las manos a ambos lados del cuerpo de Julia y se acercó lentamente a ella, pegando su frente contra la de ella y finalmente besó sus labios en su besó rápido. Julia quiso apartarse, como adolescente que era aún enamorada de la idea del amor quería que su primer beso fuese con alguien especial, no con alguien que la esclavizó. Pero Einar volvió a besarla de manera más lenta pero superficial, sus labios eran suave y sabían a cerveza y Julia no supo cuando empezó a responder el beso. Bajo la luz de la luna estaban besándose tiernamente pues era un beso algp torpe pero lleno de ternura, incluso cuando Einar abrió su boca y su traviesa lengua acarició los labios de Julia.
Se separó de ella sonriendo de esa manera tan carismática e hizo que la romana abriese la boca un poco al apoyar su pulgar en los rosados labios y volvió a cubrir su boca con la suya ahora introduciendo suavemente su lengua en la boquita de Julia. Julia se sintió rara al notar aquella cosa suave y húmeda moviéndose en su boca pero la muchacha movió la lengua contra la de él con notable inexperiencia.
Einar se levantó cogiendo a Julia en brazos mientras se besaban, ella se aferró a su cuello y él separó sus labios quedándose ambos mirándose a los ojos, comprendiendo que había un lenguaje que ambos podían hablar: los sentidos.



La llevó hasta la casa de nuevo y a escondidas de todos mientras sucedía el banquete, Einar la tumbó en la cama poniéndose encima de ella.

—No...— susurró Julia y Einar vio el miedo en sus ojos. Acarició los labios de ella y le levantó la falda retirando la ropa interior, huniendo su rostro entre las piernas de Julia.

—No...no...— en la sociedad romana lo que iba a hacer Einar estaba destinado a los esclavos, pero no pudo protestar mucho cuando notó en su sexo la lengua de Einar quién empezó a lamerla haciendo a Julia gemir. Einar pudo comprobar que era virgen cuando sus dedos empezaron a juguetear en la húmeda entrada mientras su lengua se movía sin parar y desgustaba las mieles de Roma entre sus labios, cuando notó suficiente lubricación introdujo uno de sus dedos en el sexo de Julia mientras que con el dedo pulgar frotaba el clítoris.

Julia estaba extasiada, aquello era demasiado placentero el como Einar con su boca y sus dedos la estaban haciendo sentir mil sensaciones distintas, pero era un indescriptible placer haciendola gemir y aferrarse a las mantas sintiendo sus piernas temblar mientras Einar la devoraba cada vez más rápido.

—¡Dioses! Venus sagrada....— musitó Julia mientras cerraba los ojos y experimentaba su primer orgasmo en la boca de Einar quien bebió aquello. Einar sonrió mientras pasaba una última vez su lengua y sacaba su dedo de dentro de Julia y se retiró las ropas hasta estar solo con los pantalones, dejando apreciar su bien formado cuerpo musculoso con tatuajes de símbolos nórdicos y cicatrices pequeñas.

—No...— Julia no estaba lista para entregar su virginidad, Einar lo intuyó y no fue a presionarla, sólo quería darle a probar el placer y que ella misma en un futuro se entregase. Pero su miembro estaba dolorido de estar encerrado en sus pantalones y clamando atención de modo que tomó la mano de Julia y la puso sobre el prominente bulto.

—Tócame...— ordenó Einar tumbándose al lado de Julia y desabrochando sus pantalones sacando su miembro. Julia no sabía donde meterse pues se sentía morir de vergüenza tanto por lo que él había hecho como ahora de mostrar su masculinidad sin tapujos....y Julia no pudo evitar mirar muerta de vergüenza. Einar era un auténtico príapo y él tomó la mano de Julia y la puso sobre su erección y la movió indicando como debía Julia de hacerlo. Ella decidió rendirse a la curiosidad, nunca habia visto un pene más allá de las estatuas de los dioses y no eran asi para nada, movió su mano de arriba a abajo viendo como Einar gemía de placer, indicando que lo hacía por buen camino, hasta que apretó un poco su mano a lo que Einar negó con la cabeza así que Julia fue experimentado, apretadas suaves si, mover su mano de arriba a abajo si, acariciar la húmeda punta si...Einar susurró algo que Julia no entendió hasta que él le empujó suavemente la cabeza hacía su miembro, quería sentir la suave boca de la esclava a lo que inesperadamente Julia accedió, no estaba en Roma, y él se lo había hecho ¿por qué no pagarle el mismo gesto? 
Era un sabor extraño y un tacto igual de extraño pero siguiendo las indicaciones de la mano de Einar en su cabeza, subía y bajaba pero aquello no entraba todo dentro de su boca, lentamente uso también su lengua alrededor de su miembro.
No era el mejor sexo oral que Einar había experimentado, pero dadas las circunstancias de su virginidad lo comprendió, al menos no le había mordido. Con eso se conformó y aparto a Julia para terminar él mismo de proporcionarse placer con la mano y acabar. Ella se quedó observando y recordó su estancia en el barco de esclavos ese líquido blanco y espeso que manchó muchas veces la piel y los labios de otras esclavas. Pero el de Einar no parecía oler tan mal y se dejó caer en la cama al lado de él.

—Buenas noches Julie.



*Mi amor, bésame

Comentarios

  1. Muy muy candente. Esa resistencia que se hace con boca pequeña y manos abiertas. El deseo que se cruza en toda lógica... Y la piel que tremola.
    Un encuentro lleno de algo más que pasión.
    Un beso, Sandry.
    Feliz domingo.

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    Respuestas
    1. Cuando la pasión esta cociendose es cuestión de tiempo que las chispas salten.
      Feliz domingo Mag. Un beso

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