Yggdrasil: Capítulo 16 "Las noticias"

 
—¿Qué ha pasado?— ante la repentina aparición de sus hermanos pequeños y en las condiciones que llegaron se decidió retrasar un poco la vuelta a Rowansborg, al menos por parte de Einar, él dijo que quien quisiera volver era libre, pero se quedaron allí debido a que si esos chicos habían venido desde casa hasta allí es que algo grave había pasado. Einar no tenía buena sensación al verlos ahí, no quería temerse lo peor pero se lo estaba temiendo.

—Gerd....ha vuelto....— comentó Niels con rencor, casi escupiendo las palabras, solo decir el nombre del asesino de su hermano.

    Niels e Yvette fueron junto con su hermano mayor a la casa comunal, donde vivían los jarls en los poblados, solo estuvieron con los chicos Einar, Julia, Haralf, Ingrid y Gunnar, allí, Ingrid ordenó que les sirviesen algo de comida y bebida a los chicos que se abalanzaron sobre esto con ansia.

—¿Cómo que Gerd ha vuelto? ¿Qué ha pasado?— inquirió Einar un poco alterado, sus hermanos se miraron entre si y agacharon la mirada.

—Una noche irrumpió en casa....no sabemos como llegó a entrar en nuestras tierras, pero atraparon a Sigbjorn.....— empezó a decir Yvette pero rápidamente calló apenada, ahora se podía permitir el lujo de romperse, de llorar, aunque estaba reprimiéndose a su vez, unos gruesos lagrimones ante el recuerdo de lo ocurrido con su hermano.

—Lo llevó de rehén hasta nuestra casa y lo mató. Mató a nuestro hermano delante de tu madre y la madre de Julia— un silencio sepulcral llenó la estancia, Einar apretó los puños con tanta rabia que sus nudillos se pusieron blancos, Julia puso la mano sobre el hombro de su marido intentando reconfortarle pero...dioses...Sigbjorn que era un muchacho joven y bastante agradable, algo introvertido, pero no era mal chico.

—¿Y que pasó con madre y Claudia? ¿Y Freydis? ¿Le han hecho algo a mi hija?— la voz de Einar sonó fría como el hielo, Julia quiso preguntar por su hija pero Einar se le adelanto....su hija, su pequeña hija....el solo pensamiento de su hija...¡No! ¡Tenía que estar bien!

—Creemos que están bien. Gerd usurpó el título de jarl, pero huimos, Astrid , Claudia y la bebé se han quedado en la cabaña de los cazadores. Un granjero nos ayudó a escapar y las dejamos ahí con provisiones, pero no sabemos que puede pasar.....— Einar se levantó de manera un poco agresiva tirando el asiento y saliendo de la casa con rabia, Julia no tardó en ir detrás de él.

—Einar.....

—Julia....— Einar le estaba dando la espalda, la romana puso su mano sobre el hombro de Einar intentando reconfortarle, no quería ni imaginar que era perder a un familiar y más de esa manera, asesinado de esa manera.

—Nuestra hija esta en peligro....si le pasa algo yo....— Einar se giró mirándola, estaba furioso, sus ojos azules estaban tan turbios como una tormenta, ella también estaba asustada, muy asustada, solo pensar en que Freydis....¡no! ¡Su hija estaba viva! Iban a estar todos vivos. Julia intentando calmarle llevó su mano al rostro de Einar dejando suaves caricias.

—Van a estar bien....vamos a volver a casa y vas a recuperar tu lugar y ese bastardo asesino va a ser ajusticiado

    Einar se acercó a Julia y pegó su frente contra la de la romana, necesitaba su apoyo y ahí estaban porque ella también podía entender que su hija pudiese estar en peligro, porque como Gerd la atrapase a ella y a sus respectivas madres....las mataría. Tenían que volver a Rowansborg y recuperar su hogar.

—Tengo miedo Julia, ¿y si no lo consigo? Por no estar han matado a Sigbjorn y nuestra hija esta en  peligro, no debí involucrarme en esto. Debí ejecutarle aquel día, no debí dejarle vivir, fui un blando....fui un imbécil y un blando.

—¡No digas eso! ¡Eres Einar Skjalagson, jarl de Rowansborg! Tu familia desciende del propio Odin, así que vamos a volver a nuestra casa— enfatizó mucho la palabra "nuestra" — le vas a derrotar, vamos a recuperar nuestro hogar, juntos. Y no fuiste un blando, le desterraste. Fuiste justo.— el nórdico calló durante unos segundos, bajando la mirada brevemente, pero cuando la levantó, la tormenta de sus ojos se había desatado, su mirada era la de un depredador, la de un lobo alfa.

—Lo conseguiremos, Julie.


Cabaña

    Los días pasaban y no tenían noticias, ambas mujeres por suerte pudieron ir sobreviviendo con las provisiones, pero a su vez Astrid tuvo que hacer algunas trampas para atrapar a algún pequeño mamífero para tener algo más de comer. El problema era Freydis. La leche no era suficiente y tuvieron que hacerle unos purés con la comida sólida, estaban lejos de casa y de las comodidades, la niña tenía que dormir en una cuna improvisada y el frío era cada vez más, no nevaba y rezaban porque la nieve no llegase, pero Freydis a raíz del frío tuvo fiebres, unas fiebres que temieron que se las fuese a llevar, la pobre apenas había dormido por la enfermedad y los lloros.

—Odin, padre de todos, guía a mi hijo de vuelta a casa....le necesitamos.....— rezaba Astrid, pero al ver que Freydis iba a peor, tuvo una idea arriesgada, muy arriesgada, que cuando se lo dijo a Claudia esta casi pensó que había perdido la cabeza.

—No puedes estar hablando en serio....

—Lo hago. Volveremos a casa, Freydis podrá recuperarse en nuestra casa.

—Pero puede matarnos si se niega.

—No se negará. No me negará....

—Estas loca.

—No me importa, me importa que Freydis no muera. Me casaré con Gerd y en casa Freydis se repondrá....y le mataré mientras duerme si Einar no llega antes de que me case con él.